Parecen todos normales, todos "buena calidad", algunos más elegantes y otros más extravagantes, pero ninguno es igual.
La calidad certificada es algo que puede cambiar, a lo largo de esta vida todo se puede deteriorar.
Las personas más hermosas van en copas de cristal, mientras el resto se limita a ir en jarras de metal.
Y luego está esa gente que vive para dar otra imagen diferente a los demás, ser como quieren que seas, el reflejo de un por qué, diferente y complicado.
Personalidades como chaquetas, diversas formas y diverso color, cada cual lleva la suya pero si ha alguien no le gusta no dudarás en cambiar.
(...) A mis personas hermosas yo no las quiero cambiar, y si yo cambio de chaqueta a ellas no les va a importar. (...)
Kris. M.
