Hace unos días una vieja amiga me digo que no entendía porque yo siempre me quedaba esperando a que las cosas se hicieran por si solas, a que la gente me sorprendiera con algo que yo podría hacer… pero es que yo soy así, con mis esperanzas y mis sueños, con mis sonrisas de mentira y mis ganas de pasármelo bien. Mis ganas de volver a ser lo que era... porque siendo sincera, hay gente que tiene de todo y otras que no tienen nada y es ahí cuando te das cuenta que el dinero no vale de tanto y que mucha gente va a su rollo porque en verdad cada uno tiene su vida. Y en verdad no sé porque decimos que somos amigas si realmente lo que somos es conocidas que nos vemos cada mil años y que cuando nos vemos no sabemos ni de que hablar porque ya nada es como antes, ya no tenemos nada en común.
Al final de la conversación ella me respondió que siguiera esperando... que la vida se me iría entre espera y espera, con más desilusiones que alegrías pero que así seguiría como siempre.
Kris. M.
