Es difícil esconderse en una sociedad de iguales, camuflarse entre la multitud sin mostrar una coraza. Las batallas que he ganado y las muchas que he perdido, y tú has estado conmigo aunque yo prefiero ir sola; caminar por mi sendero, con mi caballo y mi coraza.
Conocer más caballeros que se enfrentan a enemigos, y debajo de esa facha tienen corazones vivos, princesas con coronas y tacones de cristal, fuertes y de lo más valiosas que aunque nadie sabe apreciar su verdadera armadura ya que se encuentra en su alma y no se parece a la tuya.
Princesa aislada en ocasiones, que vive en dos mundos opuestos...
De día lucha en conjunto y de noche viaja entre sueños.
Kris. M.